Hoy, un niño de 1º de primaria (6/7 años), le ha dicho a su maestra:
– Llama al director y dile que me despida.
No había hecho su trabajo y estaba agobiado porque sabía que su madre cuando se enterara le iba a castigar. Quería una solución definitiva.
Mientras lo escribía me ha venido a la memoria otro golpe infantil, de una de mis hijas:
Al final de un domingo en el que habíamos estado con un amigo llamado Domingo al que ella no conocía previamente, mientras cenaba, preguntó:
Mamá, y ese señor… ¿cómo se llama mañana?