Hace un rato, finalmente, he renunciado a la jubilación anticipada, que había solicitado por si acaso. ¡Quién sabe lo que puede suceder en unos meses!
Desde que se publicó la resolución y lo hablé con mi equipo tenía pendiente presentar el papel. El tiempo siempre es escaso y hay que hacer intención para ir a correos y certificar, si no quieres ir a la Delegación Provincial.
Mucha gente, sobre todo de la profesión, no entiende que puedas querer seguir, cuando otros están enfadadísimos porque se habían hecho a la idea de jubilarse a los 60 y parece que no va a ser posible. Y no hablan de prejubilación o jubilación anticipada, a todas luces un privilegio, sino de jubilación, un derecho que consideran evidente, porque este trabajo es muy duro. (Lo es, a veces)
Bueno, pues voy a dar mis razones para seguir, haciendo constar que tengo hobbis, otras cosas para hacer, que estoy segura de que no me aburriría si aceptara la prejubilación. Es decir, que las razones para quedarme son positivas:
- Me gusta lo que hago, me siento bien en clase, sobre todo en clase, con los chicos. Disfruto cuando aprenden y cuando aprendemos, cuando se entusiasman con las cosas nuevas y quieren transmitirlas, cuando superamos las dificultades, que las hay. Tambien sufro cuando no lo conseguimos, pero la balanza está claramente desequilibrada a favor de lo primero. Y no soy la única: aquí hay otro, solo que joven (y emprendedor). Otro (algo como eso no se hace por aburrimiento. ¿a que no?). Otra más. Y otra (finalista en blogs educativos) Y otra más (con tanta experiencia como yo). Otro que intenta contagiar su pasión por las matemáticas. Y otro más. Otro (que no se deja ver, sólo como denominación del blog. Pero yo lo conozco, suele pasar por aquí). Y todos los que ya cité aquí. Y otro más. Como muestra, únicamente.
- Tengo experiencia que poner al servicio de los demás, y conservo ilusión suficiente para adaptarme a los nuevos tiempos. No me asustan las TIC, aunque me cueste más que al alumnado hacerme con ellas. Siempre pensé que sus derechos no deben depender de mis gustos. Seguiré aprendiendo.Creo que estoy en condiciones de aportar a mis alumnos y a mi centro.
- Creo que estamos en un momento de inflexión en la tarea educativa (y en muchos otros aspectos de la sociedad, pero éste es el mío). Tenemos mucho que cambiar, mucho que hacer para que deje de ser verdad lo que dice el principio de este post y la escuela responda a las necesidades del alumnado y de la sociedad actual, que no son aquellas para las que se institucionalizó. Y quiero formar parte de ese cambio, no verlo desde fuera.
- Hay muchas iniciativas despuntando que pueden terminar siendo tsunamis arrasadores o ser el parto de los montes. Desde mi parcelita colaboraré para que fructifiquen (#purposedES, #construyendohistorias, EABE11, …)
Simplemente, no me acojo al privilegio que se me ofrece, aunque lo agradezco. Y me alegro de que otros y otras, que lo necesitaban por distintos motivos, especialmente los quemados, hayan podido hacer uso de él y disfruten de años sin obligaciones profesionales.
No me resisto a poner un ejemplo más de personas que disfrutan en la escuela. Ésta se jubiló, no tuvo opción, pero continúa trabajando, cuando puede, para su cole.