En estos días en los que la CEOE ha puesto sobre la mesa, desconozco a partir de qué documentados estudios, su convinción de que el éxito escolar depende de los genes más que del contexto socioeconómico, me gustaría hacer algunas consideraciones.
Si ello fuera así, ¿cómo se explicaría que, como bien se dice en este reportaje, los hijos de familias con rentas bajas y menor nivel cultural tengan 20 veces más riesgo de fracaso escolar? ¿Tal es la proporción de poco dotados intelectualmente entre los pobres?¿No será que nuestra escuela no ha sido capaz de salvar las diferencias sociales de partida? ¿Tendrá algo que ver que pretendemos tratar igual a los que son diferentes? ¿Por qué esperamos que respondan igual chicos y chicas que viven rodeados de cultura académica y aquellos que ven su primer libro en la escuela?
Los análisis del Informe PISA que analizamos en su momento no corroboran la afirmación de la CEOE. Y mi experiencia docente tampoco. De hecho tiene mejor pronostico el alumnado con interés y hábitos de estudio que el que carece de ellos y tiene buenas capacidades intelectuales.
Recuerdo el caso de una amiga cuya tutora de 8º de EGB dijo a su madre que no perdiera el tiempo intentando hacer Bachillerato, porque no tenía capacidad para ello. Por suerte no le hizo caso. Estudio el BUP (aprobó en dos años), COU y selectividad (un curso) y Medicina (seis cursos). Obtuvo plaza en el MIR, cuando la competencia era muy elevada, a la primera, y lleva un montón de años siendo una médica excelente, con un sentido del humor fantástico que hace que sea siempre una estupenda compañía.
En consecuencia, me gustaría añadir que deberíamos hacer menos predicciones de malos resultados, que alimentan el efecto Pigmalion. Es difícil que aporte algo aquella persona de la que nada se espera. Pero algunas se salen de la casilla que les hemos asignado.
Las estadísticas sobre los repetidores son desastrosas. Ya decía el informe PISA que la repetición de curso es el fenómeno que más negativamente afecta a los resultados de los alumnos españoles. Lo comprobó durante años el grupo de orientadores de la zona de Jerez, recogiendo datos de todos nuestros IES, y lo confirman los estudios a nivel general. Sin embargo este reportaje muestra que se puede repetir curso y conseguir el éxito académico y el profesional.
La otra noche en twitter intercambiamos ideas al respecto unos cuantos decentes. Y hablando de repetición de curso aparecieron referencias a la autoridad del profesorado, al castigo por la disrupción en clase… Malas razones para hacer repetir un curso.
Pero no siempre es así. En ocasiones simplemente se ha terminado el año tonto de la adolescencia y retoman la tarea sin más. Yo he tenido este curso tres ejemplos estupendos, dos de ellos (un chico y una chica) que empezaron el curso dudando de sus posibilidades de aprobar (autoestima por los suelos) han terminado con buena nota. Un dato para animarse. Aunque cabe preguntarse si era necesario que repitieran.
Sin olvidar que cada vez tenemos más claro que repetir para hacer lo mismo no sirve de nada, no es más que una vía muerta hacia el fracaso